El Alcohol y las Conductas de Riesgo: Un Peligro Silencioso
La adicción ha sido malinterpretada durante años como una cuestión de falta de voluntad o debilidad moral. Sin embargo, la ciencia ha demostrado que se trata de una enfermedad crónica que altera el funcionamiento del cerebro, afectando la capacidad de tomar decisiones y el autocontrol. En la Clínica de Adicciones Julia Payá en Valencia, entendemos que superar una adicción no es solo cuestión de querer hacerlo, sino de abordar los cambios neurológicos y emocionales que la sostienen.
El cerebro adicto: una cuestión de neurociencia
El cerebro humano está diseñado para buscar el placer y evitar el dolor. Para ello, cuenta con el sistema de recompensa, un conjunto de estructuras cerebrales que liberan dopamina, un neurotransmisor relacionado con la motivación y el placer. Actividades como comer, hacer ejercicio o socializar generan una liberación moderada de dopamina, lo que refuerza esos comportamientos.
Sin embargo, las drogas y otras conductas adictivas (como el juego o la tecnología) liberan cantidades anormalmente altas de dopamina, inundando el cerebro con sensaciones de placer intenso. Con el tiempo, este exceso de estimulación hace que el cerebro reduzca la producción natural de dopamina y se vuelva menos sensible a ella. Como resultado, la persona necesita consumir más para sentir el mismo efecto, desarrollando tolerancia y dependencia.
¿Por qué la adicción es una enfermedad y no una elección?
Muchas personas creen que la adicción es simplemente una falta de autocontrol. Pero estudios de neurociencia han demostrado que las drogas afectan directamente el córtex prefrontal, la parte del cerebro encargada de la toma de decisiones, el autocontrol y la planificación.
Esto significa que, en una persona adicta:
•El impulso de consumir se vuelve automático y difícil de frenar.
•Las funciones de control del cerebro fallan, lo que lleva a conductas compulsivas.
•Se prioriza el consumo sobre otras áreas de la vida, incluso cuando hay consecuencias negativas evidentes.
Este “secuestro” del cerebro explica por qué una persona puede perder su trabajo, su familia o su salud debido a una adicción y, aun así, seguir consumiendo. No se trata de una simple cuestión de voluntad, sino de una alteración en la química y el funcionamiento cerebral.
Factores de riesgo: ¿Por qué algunas personas desarrollan adicciones y otras no?
No todas las personas que prueban una sustancia o participan en conductas potencialmente adictivas desarrollan una adicción. Existen varios factores que aumentan el riesgo:
1.Genética: Se estima que entre el 40% y el 60% de la vulnerabilidad a la adicción es hereditaria.
2.Ambiente y experiencias: Crecer en un entorno donde hay consumo frecuente de drogas o vivir situaciones de trauma aumenta el riesgo.
3.Problemas de salud mental: La depresión, la ansiedad y el estrés crónico pueden llevar a una persona a buscar alivio en el consumo.
4.Edad de inicio: Cuanto más joven es una persona cuando comienza a consumir, mayor es el riesgo de desarrollar una adicción, ya que el cerebro sigue en desarrollo.
¿Cómo se puede tratar una adicción?
Dado que la adicción cambia la estructura del cerebro, el tratamiento debe ser integral y abordar tanto la parte biológica como la emocional y social. En la Clínica de Adicciones Julia Payá en Valencia, utilizamos un enfoque basado en la ciencia para ayudar a las personas a recuperar su vida.
1. Desintoxicación médica
El primer paso es eliminar la sustancia del organismo de forma segura, controlando los síntomas de abstinencia con apoyo médico.
2. Terapia psicológica
La adicción no es solo una cuestión física, sino también emocional. La terapia cognitivo-conductual ayuda a:
•Identificar y cambiar los pensamientos y comportamientos que llevan al consumo.
•Desarrollar estrategias para manejar el estrés y las emociones sin recurrir a sustancias.
3. Apoyo grupal y entorno saludable
El entorno social juega un papel clave en la recuperación. En la clínica ofrecemos terapia grupal y apoyo familiar para crear una red de apoyo fuerte.
4. Prevención de recaídas
La adicción es una enfermedad crónica, por lo que las recaídas pueden ocurrir. Enseñamos a nuestros pacientes a identificar señales de alerta y estrategias para evitar volver al consumo.
Recuperar la libertad es posible
En la Clínica de Adicciones Julia Payá en Valencia, entendemos que la adicción no es una cuestión de falta de voluntad, sino una enfermedad real que requiere tratamiento profesional. Si tú o un ser querido necesita ayuda, estamos aquí para ofrecer el apoyo necesario para recuperar el control y construir una vida libre de adicciones.